Esta ciudad de la costa dálmata es conocida por sus ruinas como las del foro de época romana, junto a la iglesia redonda y prerrománica de San Donato, del siglo IX, junto a la Catedral de Zadar, del siglo XII.

En el moderno paseo marítimo, una de las atracciones es el Órgano del Mar, una obra de arte sonoro que aprovecha la presión de las olas sobre los tubos ubicados debajo de las escaleras y el flujo de aire por sus aberturas rectangulares y redondas, estas en el piso del piedras.

Otro gran atractivo es contemplar la puesta de sol, aquí con una creación original del arquitecto croata Nikola BaSié: un monumento formado con 300 placas de vidrio multicapa al mismo nivel que la acera, de forma circular con 22 metros de diámetro, con módulos fotovoltaicos. debajo paneles solares, que simbolizan la comunicación con la naturaleza a través de la luz, además del Órgano, con la comunicación a través del sonido.

Esta creación se llama Saludo al Sol y es otro símbolo de la ciudad, que atrae a muchos visitantes.